Algo que caracteriza, o encasilla mas bien, a la imagen que tienen los japoneses en el extranjero es la de gente metodista, introvertida y obsesiva. Ciertamente no son los mas bailadores de este hemisferio. El amor al detalle, la obsesión por la creacion perfecta, es algo que se ve como la meta de todo trabajo. "Si tu trabajo es barrer, has del oficio un arte".
La ultima frase suena apantalladora. Esta filosofía ha traído desde el sabor perfecto de Tonkotsu Ramen que puedo probar en cualquier Ippudoh. La receta debería de tener sutiles variantes, siendo por lo general una empresa interpretativa. De la misma manera que con un concierto de Jazz, aun por el mismo autor, uno espera, anhela, diferentes versiones. Occidental pensamiento que constantemente se encuentra con su nemesis por estas tierras. Por una parte trae seguridad, "Siempre encontrare la misma sopa, y el mismo fideo aqui", pero tambien crea un sentimiento de aborrecían prematura. Como ver todas las mañanas la misma noticia, o escuchar siempre la misma pregunta.
De momentos no me puedo sentir mas que sorprendido por el esfuerzo que algunas personas ponen en perfeccionar su trabajo, aun sea algo que no se puede mejorar, o que no vale la pena. Esto se ve exageradamente en el ambiente culinario... o mejor dicho, en la empresa del entretenimiento que se ha convertido la comida. Si alguien llego a ver Ryori no Tetsujin (Iron Chef), temo tener que decir que eso no es ni la punta del iceberg.
"El mejor pan tostado de Japón", "El melón mas dulce de hokkaido", "La vaca mas cara del mundo" Cuando se promueven los productos típicos de una región una gran parte es que platillo existe allí, independientemente de que sea algo tan común como las tortillas de maíz en México. "En Akihabara se vende Oden en lata" *gasp* "En Yokohama hay Ramen!" "En Sapporo hay Ramen!" "En Akihabara hay Ramen!"...
A quien le importa?
La ultima frase suena apantalladora. Esta filosofía ha traído desde el sabor perfecto de Tonkotsu Ramen que puedo probar en cualquier Ippudoh. La receta debería de tener sutiles variantes, siendo por lo general una empresa interpretativa. De la misma manera que con un concierto de Jazz, aun por el mismo autor, uno espera, anhela, diferentes versiones. Occidental pensamiento que constantemente se encuentra con su nemesis por estas tierras. Por una parte trae seguridad, "Siempre encontrare la misma sopa, y el mismo fideo aqui", pero tambien crea un sentimiento de aborrecían prematura. Como ver todas las mañanas la misma noticia, o escuchar siempre la misma pregunta.
De momentos no me puedo sentir mas que sorprendido por el esfuerzo que algunas personas ponen en perfeccionar su trabajo, aun sea algo que no se puede mejorar, o que no vale la pena. Esto se ve exageradamente en el ambiente culinario... o mejor dicho, en la empresa del entretenimiento que se ha convertido la comida. Si alguien llego a ver Ryori no Tetsujin (Iron Chef), temo tener que decir que eso no es ni la punta del iceberg.
"El mejor pan tostado de Japón", "El melón mas dulce de hokkaido", "La vaca mas cara del mundo" Cuando se promueven los productos típicos de una región una gran parte es que platillo existe allí, independientemente de que sea algo tan común como las tortillas de maíz en México. "En Akihabara se vende Oden en lata" *gasp* "En Yokohama hay Ramen!" "En Sapporo hay Ramen!" "En Akihabara hay Ramen!"...
A quien le importa?