El rostro de Canuto lucia nuevamente su salubre palidez, aunque su rostro no mostraba alegria alguna. Sentado frente a lo que algunos historiadores llamaron su amigo, y otros un insufrible pegoste. La verdad es que Canuto sufría, las horas se sentían largas e interminables, tan solo esperando a que Tiempo se recuperara de su muerte. Canuto sentía morir también. Moría de aburrimiento.
Los tipos en batas y tatuajes en azul le dijeron, con un acento y palabrería en 1337speak cual episodio de Star Trek, que no tenia permiso de salir de estos cuarteles, y menos mientras su acompañante no recuperara el conocimiento. Les escucho a lo lejos murmurar algo sobre como en vivo se ve mas muerto, y que cual era la ley en cuanto a polizones temporales. No sabia cuanto había pasado desde que lo pusieron en ese cuarto, extrajo de su primitivo bolsillo un primitivo y mecánico adminiculo considerado la única joyería que un hombre debe portar. Un reloj de pulso.
40 minutos.
Cuarenta minutos sentado, con nada mas interesante que ver a Tiempo recostado. "Al menos no esta hablando". Cuarenta y un minutos. Canuto cerro los ojos por un momento, meditando para pasar el tiempo. Meditando sobre la vida, la muerte, el juego de Sudoku que dejo comenzado. Aun no se aprendía siquiera las reglas, y el juego quedaría sin terminar... hasta que la batería de su vieja inugami se terminara. ¡Concentración, enfoque! La mente sobre la materia, la mente sobre el espacio, la mente sobre el tiempo. Probablemente aun había mucho que esperar, se tiene que entrenar el cerebro lo mas que se pueda, ahora que se puede. Canuto abrió los ojos.
42 minutos.
Tiempo abrió los ojos.
"Argh, mi cabeza... que ¿nos fuimos de parranda?"
"No, estabas muerto"
"Ah"
Contenido y capitulos anteriores
Los tipos en batas y tatuajes en azul le dijeron, con un acento y palabrería en 1337speak cual episodio de Star Trek, que no tenia permiso de salir de estos cuarteles, y menos mientras su acompañante no recuperara el conocimiento. Les escucho a lo lejos murmurar algo sobre como en vivo se ve mas muerto, y que cual era la ley en cuanto a polizones temporales. No sabia cuanto había pasado desde que lo pusieron en ese cuarto, extrajo de su primitivo bolsillo un primitivo y mecánico adminiculo considerado la única joyería que un hombre debe portar. Un reloj de pulso.
40 minutos.
Cuarenta minutos sentado, con nada mas interesante que ver a Tiempo recostado. "Al menos no esta hablando". Cuarenta y un minutos. Canuto cerro los ojos por un momento, meditando para pasar el tiempo. Meditando sobre la vida, la muerte, el juego de Sudoku que dejo comenzado. Aun no se aprendía siquiera las reglas, y el juego quedaría sin terminar... hasta que la batería de su vieja inugami se terminara. ¡Concentración, enfoque! La mente sobre la materia, la mente sobre el espacio, la mente sobre el tiempo. Probablemente aun había mucho que esperar, se tiene que entrenar el cerebro lo mas que se pueda, ahora que se puede. Canuto abrió los ojos.
42 minutos.
Tiempo abrió los ojos.
"Argh, mi cabeza... que ¿nos fuimos de parranda?"
"No, estabas muerto"
"Ah"
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1 comentario:
Como diria el pelon favorito de muchos... el Profesor X en el legendario show... "El Hombre Araña y sus sorprendentes amigos"....
-"¿Nó que nó?"- ;)
TIempo es inmortal, aun con todas las justificaciones literarias usables o reutilizables. :ind:
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